La guerra de la vivienda - 1955

Después de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), Francia atraviesa una seria crisis de la vivienda. Sobrepasada por las solicitudes de familias sin hogar o en condiciones precarias de vivienda, la asociación Emaús, creada en 1949, responde realojando a estas familias y empezando las obras de las viviendas de emergencia. De esta manera, desde los inicios de su acción y hasta el final de su vida, el Abbé Pierre convierte la lucha por una vivienda digna en un pilar de su acción. Como prueba de ello quedan numerosos textos, en concreto el texto manuscrito «La guerra de la vivienda» (1955).

 

La guerra de la vivienda

Nos guste o no, lo reconozcamos o nos neguemos a verlo, [la guerra] está declarada.

Ya nada podrá pararla.

La ganaremos con la movilización general de las energías de la nación, aunando las fuerzas de todo el mundo bajo la dirección de los Comisionados de la Vivienda en cada región, todopoderosos en su ámbito y bajo las órdenes directas del Jefe de Gobierno.

O la perderemos en la revuelta. Y esto ya no es una exageración, porque ciertamente, los responsables del Estado y los privilegiados y defensores de los privilegios sin justificación, que se oponen al bien público, lo ignoran, pero la ignorancia no impide que la realidad desconocida sea la que es. Hoy por hoy, las cosas han llegado al punto en que se reúnen las dos condiciones para la revuelta: el exceso de sufrimiento y pena por encima de límites soportables para quienes sufren, y la obviedad, para quienes aman, de que deben estar [a su lado]* han alcanzado un nivel de horror que solo la revuelta o el pleno poder pueden igualar.

Y si pensamos que no se reúnen las condiciones para el pleno poder, hay que reconocerlo. Las de la revuelta lo están, porque el horror y lo absurdo de la situación se dan simultáneamente, y las víctimas y los defensores son una multitud, todavía no embrutecida, unida en un frente decidido de lucha a vida o muerte. Para quienes vivir aquí no es mejor —incluso a veces (lo he escuchado cien veces) es peor— que morir.

*Aclaración para facilitar la comprensión

La guerra de la vivienda - 1955