El arte y la cultura representan espacios de creación y de tejido social, desde el respeto de la diversidad de cada persona.
Las disciplinas con una importante dimensión política constituyen un medio de expresión alternativo que puede intervenir en el espacio público y contribuir a la transformación social. El movimiento Emaús invierte cada vez más en estas dos vías, ya que son un medio potente para denunciar las situaciones de injusticia y hacer valer las reivindicaciones políticas.
