Frente a las depredaciones de la industria agroalimentaria y al acaparamiento de tierras, las asociaciones Emaús desarrollan modelos agrícolas basados en la agroecología y en la defensa de los pequeños agricultores.
Emaús Internacional defiende que son posibles las alternativas respetuosas con las personas y el medio ambiente y que una agricultura sostenible y responsable permite luchar contra la pobreza. Esta última contribuye a la seguridad alimentaria y a la erradicación de la pobreza extrema, preservando al mismo tiempo los ecosistemas; permite restablecer el vínculo entre productores y consumidores, priorizando los mercados locales y los circuitos de la economía solidaria; pone énfasis en valores humanos como la dignidad, la equidad y la inclusión; y se basa en prácticas adaptadas a los contextos sociales, medioambientales, económicos, culturales y políticos de cada territorio.
